lunes, 9 de abril de 2012

Viernes Santo

 VIERNES SANTO




No hay nada, no hay cantos, ni flores. Sí, hay una Cruz, y el ella Jesús.

Algunos dirán “los cristianos somos masoquistas”, pues si un ser querido hubiera tenido una muerte trágica, con un puñal o con una bala, difícilmente llevaría colgado a mi cuello el objeto con el que lo mataron. Sería absurdo recordar la manera con qué lo mataron. ¿Por qué recordamos la forma en que lo mataron a Jesús? Lo que pasa es que estamos celebrando otra cosa, no el hecho de que allí mataron a Jesús, sino que es allí en la Cruz Jesús dio la vida por nosotros y dónde recibimos la Vida. La Cruz se convirtió en signo de Vida.

_ Por eso con la Cruz marcamos la frente del niño al bautizarlo, se la coloca como protección en la cuna; quizás la llevemos puesta en el cuello o puesta en la tumba de un difunto, en una torre o en la punta de un cerro.

_ No es el signo donde murió Jesús, sino el lugar donde Jesús dio la vida por nosotros.

-Jesús asume nuestras limitaciones y nuestros pecados, por eso nos redime. Lo que no se asume no se redime. Nosotros debemos aceptar, asumir, nuestros sufrimientos, nuestras cruces para superarlos y vivir luego en plenitud.

POSTRACIÓN

La celebración de la Cruz del viernes Santo, comienza con la postración de los ministros que presiden. Es un momento solemne en que se quiere simbolizar por un lado el anonadamiento del hombre consagrado, servidor. Luego la oración confiada que la Iglesia madre realiza por sus hijos diseminados por el mundo.

Foto: Celebración realizada en Parroquia Nuestra Señora de la Paz en Florencio Varela. 6/4/2012

Diácono: Silvio Rodriguez

Diácono: Claudio Noziglia

Sacerdote: Oscar Farias

1 comentario:

  1. Que hermosa experiencia, a pesar de todos los inconvenientes que hubo por la tormenta. Para Dios no hay imposible, y con vos lo hiciste posible.

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